Sofocantes.
Así son las palabras que me dices.
Recostado en mi hombro te dispones a contar las estrellas
y lo único que deseo es que esa noche sea nublada.
Para que te calles.
No me malinterpretes, eres amable
pero no hay nada mas.
Juro que lo intente.
Intente quererte
y lo único que logre
fue enterrarme en la cama
con la depresión como almohada.
Tomas mi mano y apresas mis dedos
y lo único que deseo es correr.
Lo mas lejos que pueda de ti.
Un lugar acogedor donde pueda ser
sábado, 6 de agosto de 2016
jueves, 12 de mayo de 2016
Tus malditos ojos
Todas aquellas cosas que dijiste
¿Acaso solo yo las puedo recordar?
porque de nuevo te estoy esperando
con aquel vestido que te gusta,
cargando con el libro de poemas
que hiciste para mi,en aquella
parada de bus cerca del museo donde
decidimos que era amor pero
no queríamos estropearlo.
Ya no uso aquel lazo para el cabello
porque me dijiste que te encantaba
que lo tuviera suelto.
Espero que lo recuerdes
porque yo sigo aquí y comienzo
a pensar de que debo comenzar otro libro
y ningún poema sera para las constelaciones
que se encuentran en tus ojos,
Ninguno sera para tus malditos ojos.
lunes, 9 de mayo de 2016
Quizá solo un poco
Morimos, día tras día.
Saltamos esperando volar.
Extendemos nuestros brazos.
Para atrapar algo,
para atrapar un poco de suerte,
un poco de amor,
un poco de algo
que nos logre sacar
de este profundo pozo
lleno de dolor.
Estas tú
Detrás de las sombras y el dolor.
Detrás de las espinas que rasgan mi piel.
Detrás de las lagrimas falsas.
Estas tu.
Toma mi mano
Toma mi mano
Porque las sendas son oscuras.
Toma mi mano,
Porque tu alma es pura
Y no quiero perderte.
Toma mi mano
y prometo mantenerte con vida.
Toma mi mano
Porque sí.
Toma mi mano
Porque yo lo necesito.
Hazte responsable de mi amor
Dame una razón para que me vaya
porque yo te daré tres para quedarme.
Quizá mentí,
lo hice
y te quedaste.
Dibujando una constelación
en mi,
curando heridas,
creando un futuro incierto
no tan alejado de nosotros.
Sentí tus labios cada noche
en el desierto de los míos
despertando, sin duda,
mi interés a tus misteriosos ojos.
¿Es posible que la vida sea
explicada en treinta días?
Tu me la has mostrado,
has dejado pequeñas notas
en la nevera cada mañana
con pequeños versos,
Has creado otra yo
a la que no le da miedo mirarse
en el espejo.
¿Que me has hecho?
¿Acaso tus encantadores ojos
me han hipnotizado?
Entonces dejemos lo todo,
podemos ser.
Me has enamorado
ahora...¡Hazte responsable!
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